Decías que necesitabas un amor
lo repetias cada día
y cómo yo te amaba con desazón
vestí la piel de tus anhelos
no fueron los besos
no fueron las caricias
no fue nada fisico
lo que te dí no fue materia
te dí el alimento que más añoraba tu alma
te dí lo más sensible y duradero
eso que no se borra con la razón
eso a lo que no podés aplicarle la lógica
no quise ser campeón de deseos furtivos
aunque si la fuente donde se colme tu placer
no quise ser el andariego que te abandona a tu fortuna
no quise ser el seductor que huye una mañana
quise ser el refugio de días aciagos, de hastío y soledad
ser tu componente, tu río, tu caudal...
23A: el principio de revelación y el principio de una rebelión
-
La marcha más grande de las últimas décadas la organizó un desquiciado que
habla con perros muertos
El Desquiciado tuitea 24 horas después de la bofeta...
Hace 1 día
0 comentarios:
Publicar un comentario